domingo, 1 de noviembre de 2009

Asi soy yo

Siempre fui de las personas que cuentan historias, de las que se acuerdan de los detalles, de las luces y de las calles, de las que no olvidan las miradas en la oscuridad, de las que guardan en su baúl una buena broma y una buena carcajada, de las que recuerdan los sonidos, de las que reproducen el eco de una caída y de las que hace reír.

Soy la que habla con las estrellas y se ríe conversando con los perros y los gatos. De la que saluda a un extraño, tal vez esa persona necesite algo diferente ese día.

Me atrevo a burlarme primero de mí misma y he aprendido con los pocos años que tengo ha observar en el reflejo de las sonrisas de mis amigos la esperanza de un mejor día solo si duermo temprano.

Soy de la que organiza reuniones, reencuentros y citas en cafés y bares, de las que los anima a viajar y de la que los hace bailar. Quisiera que el día tuviera más horas y poder ir al cine con todos ellos, quisiera poder tomar mil cafés en las tardes por Miraflores y un chilcano cada día de la semana, quisiera que el sábado se repitiera tres veces y poder disfrutar las tardes y las noches con todos ellos.

A pesar de ello, he descubierto que soy mejor contando las historias de los demás, que cometo demasiados errores contando mi propia historia, porque todavía no me desprendo de aquel velo transparente instalado entre mis ojos y la realidad. De vez en cuando alguno de mis amigos me lo quita para secarse las manos y utilizarlo como tissue.

Si pudiera regalarle a cada uno de mis amigos una estrella lo haría, quisiera escribirles una canción o mil poemas tal vez.

Hoy quise hablar de ellos, de los que están tras estas líneas, de sus voces y de sus miradas, de aquellos por los cuales escribo, es por sus aventuras y las mías.

2 comentarios:

La Gloriosa... dijo...

Yo no sólo soy malo contando mi historia, sino que también escribiéndola. A veces me ilumino y empiezan a salir cosas buenas, pero cuando las cosas no salen...mejor dejar de escribirla por un rato.

Un beso!!

Catalina dijo...

Yo que te leo, no concuerdo en lo que dices, hay veces nos inspiramos y estamos felices ademas de orgullosos del resultado final; pero otras veces las líneas impregnadas de cotidianidad nos acercan más y así podemos entendernos y lograr que otros nos entiendan!!

No dejes de escribir!!! plis!! jaja

Besos